La Jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, dio a conocer este miércoles la estrategia “Ciudad Circular: Basura Cero para Transformar la Capital”, un ambicioso plan que busca que la mitad de los residuos sólidos de la Ciudad de México deje de ir a rellenos sanitarios y se convierta en recursos útiles.
Durante la conferencia de prensa realizada en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, Brugada Molina explicó que la estrategia se sustentará en cuatro ejes de acción: nueva infraestructura, corresponsabilidad ciudadana, gobernanza e innovación, y reducción y separación de residuos desde los hogares.
“Nos hemos planteado garantizar que 50% de lo que llega como residuo a la ciudad se transforme, fomentando menos contaminación, menor emisión de gases y mayor aprovechamiento económico de los residuos”, señaló la mandataria.
Entre las acciones principales destacan la modernización de la planta de reciclaje del Bordo Poniente, la construcción de cuatro nuevas plantas de composta con capacidad de procesar 200 toneladas diarias cada una, y la instalación de una planta de transformación de llantas en impermeabilizante, así como la adquisición de 34 nuevos camiones de recolección. La inversión inicial para estas obras es de 405 millones de pesos, sin contar los camiones, cuyo costo asciende a 85 millones de pesos.
Brugada Molina resaltó que esta estrategia se proyecta a largo plazo, con metas hacia 2030, y agradeció la labor de las y los trabajadores de limpia, así como la participación de la ciudadanía y del sector privado, para consolidar la transición hacia una economía circular, que sustituya el modelo lineal de desecho.
Por su parte, Raúl Basulto Luviano, titular de la Secretaría de Obras y Servicios (SOBSE), detalló que las nuevas plantas de composta estarán ubicadas en las alcaldías Xochimilco, Tlalpan, Tláhuac y Álvaro Obregón, y que actualmente la ciudad gestiona más de 8 mil 500 toneladas de residuos diarios, cifra que se espera reducir significativamente gracias a esta estrategia.
Además, se construye un Módulo de Carbonización Hidrotermal, que transforma residuos orgánicos en fertilizante y carbono, con planes de ampliar la infraestructura a 10 módulos en toda la capital. En cuanto a las llantas, se proyecta una planta de transformación con inversión de 35 millones de pesos, destinada a producir materiales para obra pública y mezclas de asfaltos.
Finalmente, la secretaria de Medio Ambiente, Julia Álvarez Icaza, anunció un programa de compostaje comunitario en unidades habitacionales, que permitirá un tratamiento más cercano de los residuos orgánicos, fomentando la participación activa de la población en la estrategia.
Con esta iniciativa, la Ciudad de México busca consolidarse como un referente en gestión de residuos y economía circular, dejando un legado sostenible para las próximas generaciones.