Ciudad de México, 11 de agosto de 2025.– El corazón de la capital vivió una escena poco habitual: el Zócalo capitalino amaneció ayer bajo el agua, tras una intensa lluvia que dejó más de 70 milímetros de precipitación y provocó acumulaciones de hasta 30 centímetros en la zona del Antiguo Palacio del Ayuntamiento y sus alrededores.
La magnitud del aguacero llevó a las autoridades a activar la alerta púrpura, el nivel más alto en la escala de riesgos por precipitaciones, en la alcaldía Cuauhtémoc, donde se ubica la emblemática Plaza de la Constitución.
El torrente no solo anegó el centro histórico, sino que también afectó otras zonas de la ciudad, complicando severamente la movilidad. Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana se desplegaron para destapar coladeras, desviar el tránsito y auxiliar a automovilistas atrapados por el agua.
La lluvia intensa, que sorprendió a residentes y turistas, puso a prueba los sistemas de drenaje y volvió a encender el debate sobre la infraestructura pluvial en la capital. Mientras tanto, la postal del Zócalo sumergido quedará en la memoria como un recordatorio del poder de la naturaleza sobre el asfalto capitalino.
