Por Juan Pablo Ojeda
En un cierre de infarto que definió la primera semana de la NFL, J.J. McCarthy fue la figura que llevó a los Minnesota Vikings a un triunfo 27-24 sobre los Chicago Bears en su casa. El joven mariscal de 22 años tardó en sentirse cómodo, pero cuando lo hizo, lideró una remontada que quedará en la memoria de los aficionados.
El inicio del juego fue complicado para McCarthy, sometido a la presión de la defensiva de Chicago, mientras que Caleb Williams dejaba claro su explosividad con un acarreo de 9 yardas que terminó en touchdown. Sin embargo, Minnesota logró mantenerse cerca en el marcador, y al medio tiempo la ventaja era de 10-6.
Todo se complicó en el tercer cuarto, cuando McCarthy lanzó una intercepción que Nahshon Wright convirtió en pick six, poniendo a los Bears arriba en el marcador y haciendo pensar que los Vikings podrían quedarse atrás en este duelo divisional.
Pero la confianza del coach Kevin O’Connell y el talento del joven quarterback fueron clave. En el último cuarto, McCarthy primero conectó con Justin Jefferson para un pase de 13 yardas, después con Aaron Jones en un envío de 27 yardas que dio la vuelta al marcador, y finalmente se encargó de sellar la victoria con un acarreo de 14 yardas para su primer touchdown terrestre en la NFL.
Chicago intentó reaccionar con un pase de Williams a Rome Odunze, pero los Vikings controlaron el reloj y aseguraron la victoria en este emocionante estreno de temporada. El debut de McCarthy promete ser solo el inicio de una campaña llena de emociones para Minnesota y su joven mariscal.